miércoles, 27 de mayo de 2009

"CUCHUFLITA"

Hace poco descubrí por facebook (por que otro lugar si no) que una conocida, estaría mal decir amiga, de la universidad tenía su oficina de abogacía, misma que atendía con bastante éxito, así que mensaje allá, mensaje acá, quedamos en reunirnos a tomar un café durante mi próxima visita a la ciudad de La Paz.

Recordaba el porqué nos habíamos distanciado sobremanera estos últimos nueve o diez años hasta que caí en cuenta que su forma de ser había sido fundamental para ello.

La conocí en tercer semestre de Universidad y como habíamos formado grupo y vivíamos apenas separados un par de cuadras, nos veíamos con cierta frecuencia, estudiamos un par de veces en su casa y en la mía otras tantas, íbamos de vez en cuando a la cafetería o a charlar por los jardines de la U. La impresión que tenía de ella era buena hasta que, porque en algún momento tiene que salir una frase así, cuando dimos el primer parcial y nos entregaron los resultados, vi que salió furiosa al frente y públicamente reclamó su nota al darse cuenta que había sido la cuarta mejor del curso, discutía a voz en cuello cada respuesta y cuestionaba que la evaluación había sido parcializada y que por ser mujer se la discriminaba. Por entonces, yo estaba en pleno proceso de examen de grado de mi primera carrera y ésta segunda, la llevaba con más calma, midiendo fuerzas, obligándome sólo cuando las circunstancias lo ameritaban, veía con una sonrisa en los labios a la clásica niña, seguramente hija única decía por entonces, caprichosa, que no está dispuesta a perder siquiera en tunkuña.

Ese fue el inicio de una etapa que poco me valía contradecirla, no tenía sentido entrar a la pelea con una mujer ni en reuniones de grupo ni en el lado personal. Hay que reconocer que era buena alumna aunque no lo suficiente como para igualar a dos amigos, uno de los cuales se agarró a puñetes con un docente por un desacuerdo en plena clase (sería mejor decir que el docente lo agarró a él, ja!, qué tiempos aquellos) y el otro con el cual jugábamos “ajedrez a ciegas”, es decir sin tablero, sin piezas visibles, todo en la mente, verán la dificultad de ello si intentan llegar siquiera a la quinta o sexta jugada; ambos eran mucho más centrados mental como emocionalmente, aunque claro, decía para mi mismo, se tomaban las cosas demasiado en serio y aún lo hacen, la vida es para disfrutarla, es una sola, al fin y al cabo, no saldremos vivos de ella.

Cada materia resultaba un reto para ella, ser la primera de la clase, en responder, en presentar los mejores trabajos y dar los mejores exámenes, cuando no lo conseguía, ardía en furia, los ojos parecía que iban a explotarle y se llenaba de cólera contenida.

Poco después y cuando vine a vivir a Santa Cruz me enteré que había empezado a trabajar, hacer sus primeras armas sin mucho éxito, ya que su carácter le jugaba malas pasadas, originaba siempre cierta animadversión su forma de ser, llegando a extremos por demás fatuos, como que sus compañeros de trabajo le escondían sus papeles y por tanto los trámites que realizaba quedaban pendientes con la correspondiente llamada de atención de sus inmediatos superiores y cosas por el estilo.

Lo último que supe, hace unos días, es que trabaja muy bien, se rozaba con la crema de la nata y que se decía a sí misma, la mejor abogada de la ciudad y de lejos, claro se tejen leyendas entre los cercanos, que hace favores no muy honorables a ciertas autoridades o que tuvo que pasar por ciertas sábanas para alcanzar su objetivo, todo es parte de la leyenda.

Ahora que la veré en un par de semanas veré si algo en ella ha cambiado o sigue siendo la misma, con la que no se podía decir más que tres o cuatro palabras sin que fuese interrumpido. En fin, amigos son amigos y conocidos, tenemos varios.

9 comentarios:

Cecy dijo...

Te deseo suerte en tu encuentro.
Ojala sea bueno y no te haga recordar porque se alejaron.

Besos.

Lilyth dijo...

Todos tenemos nuestras espinas
;)

Janeth dijo...

Hola Gustavo, pienso que el reencuentro sera bueno, ya que la gente cambia, madura y las cosas de la universidad quedan atras.
Ahora que ha pasado el tiempo se veran las cosas de diferente manera.
Te deseo lo mejor
Besitos
Janeth

juan josé dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
juan josé dijo...

Ah, gracias por el comentario...sólo por eso te pongo un enlace en mi blog.

Pero mejor nos dejas a los 3 en el anonimato.

:)

Asesino De Leyendas dijo...

Cecy: Ojalá y ciertas cosas hayan cambiado. Esperemos a ver q pasa

Lilyth: Y si, tienes razón, aunq yo no le diría así a ella, pero bueno... haber q resulta

Janeth: Si como dije en tu blog, "cambia, todo cambia", ojalá sea para mejor.

JuanJo: te diste cuenta al rato quien es verdad? jaja... creo haber sido benevolente y más bien haberla dejado con un toque de bondad. Gracias... Un abrazo.

Pike dijo...

Las personas con el tiempo cambian, evolucionan, maduran, por lo menos eso es lo que se espera. Veamos que tal te va en la cita.

Saludos.

Asesino De Leyendas dijo...

Pike: Un abrazo, tus historias siempre sacan una carcajada

Un abrazo

Unknown dijo...

No estoy muy deacuerdo con tu comentario , cada quien tiene derecho de llevar su vida como le da la gana y me parece poco etico que lo comentes por aca .
Pero en fin eso es lo que yo creo , no todos deben estar de acuerdo .
Saludos querido asesino